Los principales objetivos que perseguimos con la evaluación son, controlar el proceso de entrenamiento y los cambios que este produce en el rendimiento. Por ello es importante evaluar sobre ello y a partir de ahí prescribir el entrenamiento. Una valoración bien hecha es el inicio de la estructuración de un método de trabajo, así que es muy importante saber de dónde partimos, hacia donde queremos ir y que tenemos que hacer para conseguir ese fin. Cualquier corredor sabe que la técnica de carrera es un factor importante para avanzar en su entrenamiento y mejorar sus capacidades. Partiendo de la base de que una posición adecuada no sólo te ayuda a cuidar tus propias articulaciones y músculos, sino que también es un factor que te permitirá aumentar tu velocidad y tu resistencia.
El entrenamiento de fuerza es un complemento importante para el progreso de un corredor, debido a que fortalece los músculos y las articulaciones, ayuda a mejorar el tiempo de carrera y disminuye de forma considerable el riesgo de lesiones. Realizar un entrenamiento de fuerza siendo corredor, significa incluir ejercicios con pesas (o sin ellas) en nuestros entrenamientos para conseguir fortalecer tu musculatura lo cual te beneficiará de cara a tu prueba. Todavía hay gente que piensa que este tipo de entrenamiento empeora su rendimiento ya que al aumentar tu masa muscular, lo cual aumenta tu peso, resta velocidad y empeora su resistencia. Pero no es así. Con un correcto y adecuado programa de fortalecimiento muscular combinado con tu entrenamiento de carrera, desarrollarás tu masa muscular y aumentarás tu potencia mejorando la calidad de las fibras de tus músculos (las respuestas nerviosas) y no hipertrofiando (ganando mayor volumen muscular). Como sabes, correr es un ejercicio que para llevarlo a cabo se necesita la implicación de muchos grupos musculares, y si estos músculos no se encuentran bien preparados no van a responder correctamente. Lo mismo ocurre con tus articulaciones, como son los tobillos o las rodillas, que reciben continuos impactos a cada apoyo que das. Por lo que, un trabajo de fortalecimiento de músculos y articulaciones es un refuerzo muy recomendable para ayudarte y minimizar todo lo posible el riesgo de sufrir una lesión.
Beneficios
Eficiencia
el fortalecimiento de tu zona abdominal (core) te ayudará a mejorar y a mantener tu postura corporal a la hora de correr hasta el final, lo que se traduce en una mayor eficiencia de tu funcionamiento como corredor.
Resistencia
con un entrenamiento adeucado y personalizado de fuerza, tus músculos serán capaces de realizar carreras más largas sin sentirte fatigado, lo que te ayudará también a mantener una postura de correr (técnica de carrera) lo más correcta posible.
Velocidad
la mejora de tu forma física y de tu resistencia va unido a la consecución de un ritmo más rápido, por lo que el entrenamiento de fuerza es muy buen método para mejorar tu velocidad. Además, con este entrenamiento empezarás a notar resultados bastante pronto y cómo mejoras tus tiempos de carrera.
Facilidad para correr
el trabajo continuo de los músculos de las piernas te ayudará a mantener la resistencia en carrera, y mantendrá la postura de tu espalda y zona abdominal erguida y correcta sin encorvarte durante la carrera o sobre todo en los tramos finales.
Reducir las lesiones
para reducir el riesgo de lesiones es esencial que realices ejercicios para trabajar la zona abdominal y lumbar, y el tren inferior de tu cuerpo (glúteos, muslos y piernas). Aumentando la tonificación de estos músculos conseguirás correr más tiempo sin fatigarte y manteniendo una postura correcta, reduciendo el riesgo de dolor de espalda u otros problemas asociados a una mala ejecución de tu técnica de carrera. El hecho de no lesionarte te ayudará también a mantenerte motivado para seguir corriendo y progresar en otros aspectos de tu técnica.
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